Basílica de la Sagrada Familia




La Basílica de la Sagrada Família es la obra más conocida de Antoni Gaudí y se ha convertido en símbolo indiscutible de Barcelona. Extravagante, ambicioso y polémico, este moderno templo, único en el mundo, está en proceso de construcción desde 1882, y se prevé que se acabe sobre 2030.
En 1882 se colocó la primera piedra de esta basílica colosal, hoy en día todavía en construcción. Si bien al principio la Sagrada Família fue un proyecto encargado al arquitecto Francesc de Paula Villar, tan sólo un año después el joven Gaudí fue designado para continuar la obra, a la cuál se dedicó hasta el momento de su muerte en 1926. Gaudí acabó la cripta y la fachada lateral del Nacimiento, declaradas Patrimonio de la Humanidad. Las maquetas y dibujos conservados han permitido continuar las obras, financiadas desde su origen con la aportación de donaciones anónimas.
La Sagrada Família quiere ser una construcción simbólica, motivo por el cual tiene tres fachadas monumentales: la de levante, dedicada al Nacimiento de Cristo, la de poniente, dedicada a la Pasión y Muerte, y la de la Gloria, la mayor, dedicada a la fe religiosa. Las cuatro torres de cada fachada simbolizan, en conjunto, los doce apóstoles. Una torre cupular que coronará el ábside será el símbolo de la Madre de Dios, y las cuatro grandes torres dedicadas a los evangelistas rodearán la aguja central que se levantará sobre el crucero y simbolizará al Salvador. Desde el interior de la basílica se puede subir a las torres, a pie o en ascensor, y contemplar la magnífica vista de Barcelona.
