Gran Teatro


Dirección: C/ Vázquez López, 13
Haciendo honor al título concedido por Alfonso XIII, el 30 de agosto de 1923 se inaugura este Teatro nacido de las aspiraciones y anhelo de la burguesía onubense. Fue proyecto de Pedro Sánchez y Núñez presentando un estilo neoclásico tan en moda dentro del historicismo arquitectónico del siglo XIX y tan arraigado en toda España para la construcción de edificios de carácter cultural, especialmente teatros.
Su fachada exterior presenta almohadillado en todo su recorrido y tres vanos de entrada con arco semicircular para entrada del público, mientras que en los laterales los vanos de entrada son rectos y utilizados para entrada y salida de los interventores de las obras. La zona central de fachada viene marcada por unas enormes vidrieras soportadas por trozos de pódium (decorados con máscaras) y a su vez ménsulas con decoración vegetal y separadas todas ellas por columnas de orden corintio gigantes.
Remata el edificio un tercer piso en cuya parte inferior correspondiente a cada calle, lleva óculos decorados con guirnaldas y como remate de edificio lleva dos pináculos a cada lado y un frontón con cartela.
Funcionalista en la distribución interior, no responde por sus esquemas espaciales al diseño tradicional de un teatro, ya que se realizó pensando en el nuevo espectáculo denominado "cinematógrafo", que empezaba a surgir en la época. Prueba de ello es la desproporción existente entre la zona de espectadores y la escena o el vestíbulo, dependencias ambas mucho más reducidas en beneficio de un mayor aforo.
Su fachada exterior presenta almohadillado en todo su recorrido y tres vanos de entrada con arco semicircular para entrada del público, mientras que en los laterales los vanos de entrada son rectos y utilizados para entrada y salida de los interventores de las obras. La zona central de fachada viene marcada por unas enormes vidrieras soportadas por trozos de pódium (decorados con máscaras) y a su vez ménsulas con decoración vegetal y separadas todas ellas por columnas de orden corintio gigantes.
Remata el edificio un tercer piso en cuya parte inferior correspondiente a cada calle, lleva óculos decorados con guirnaldas y como remate de edificio lleva dos pináculos a cada lado y un frontón con cartela.
Funcionalista en la distribución interior, no responde por sus esquemas espaciales al diseño tradicional de un teatro, ya que se realizó pensando en el nuevo espectáculo denominado "cinematógrafo", que empezaba a surgir en la época. Prueba de ello es la desproporción existente entre la zona de espectadores y la escena o el vestíbulo, dependencias ambas mucho más reducidas en beneficio de un mayor aforo.